El Safrán conquista la victoria final por delante del PRB y el Estrella Damm

El francés Safrán confirmó su favoritismo y se adjudicó la victoria final en la Vuelta a España a vela tras la sexta y última etapa, en la que fue segundo, por detrás de su compatriota, el PRB, que también le escoltó en el podio, donde el tercer escalón fue para el Estrella Damm español.

La última etapa, que unió los puertos de Palma de Mallorca y Palamós de 225 millas, fue emocionante hasta el final, donde el triufo se decidió a cinco millas de la llegada a favor del PRB, mientras que entre el segundo y el quinto sólo pasaron 10 minutos, después de 36 horas compitiendo.

Y es que desde la meta volante de Palamós, por donde pasó primero el Movistar, seguido de Estrella Damm, Safran, que aseguró así su triunfo final, PRB y 5-W Hoteles-Nova Bocana, las alternativas fueron constantes, dependientes del viento que fue amainando.

Así, el último bordo por la costa del PRB le permitió escaparse unos valiosos metros y lograr su segunda victoria de etapa, dejando en su estela una feroz pugna, donde se dirimía el tercer peldaño del podio final.

Teniendo ya el Safran la victoria en su mano, y el PRB la segunda plaza, acabó con triunfo su participación en esta primera gran regata de los IMOCA Open 60 alrededor de la península.

Por su parte, el Movistar se quedó sin opciones, ya que necesitaba la victoria y dependía también del Estrella Damm' y del W Hotels. El primero tenía un margen de dos barcos respecto al segundo, lo que obtuvo al ser quinto frente al tercer puesto de su rival, con lo que el tercer puesto del podio se decidió gracias a su mejores parciales tras el empate final a puntos.

Mientras, el GAES Centros Auditivos, el Central Lechera Asturiana y el Pakea-Bizkaia mantuvieron puestos ya habituales, porque en las seis etapas han repetido la misma clasificación.

"Estoy muy contento del tercer puesto final. Antes de empezar la Vuelta pensábamos que el 'W Hotels' y el 'Movistar' quedarían por delante, pues pienso que sus barcos son más rápidos", declara Pepe Ribes, patrón del Estrella Damm.

"La Vuelta me parece una regata muy buena, todos los equipos coincidimos en eso, tiene futuro. Es muy variada en cuanto a condiciones de navegación, emocionante por el continuo contacto de los barcos y divertida por las escasas diferencias que se han visto en algunas etapas. Ojalá pueda estar disputando la segunda edición", añadió.

Alejandro Cañizares, segundo en el Abierto de Francia

El golfista español Alejandro Cañizares es segundo en el Abierto de Francia, que se disputa en París, donde José María Olazábal regresó después de ocho meses de ausencia por sus problemas reumáticos y acabó último, a 19 golpes del líder tras la primera jornada, el holandés Robert Jan Derksen. Olazábal completó la primera vuelta al campo de San Quintín con un total de 82 golpes, por culpa sobre todo de un quíntuple 'bogey' en el noveno hoyo, que le relegó hasta la última posición de la clasificación dentro de un discreto día entre los españoles, salvo Alejandro Cañizares, con 66 golpes, a 3 de Jan Derksen. El madrileño encabeza el trío de perseguidores, junto con el alemán Martin Kaymer, actual defensor del título, y el francés Jean Van de Velde, que se situaron a tres golpes de la cabeza después de haber hecho cinco golpes bajo el par en los primeros 18 hoyos. Al término de la primera jornada, se situó en la cabeza el holandés Robert-Jan Derksen, con 63 golpes, aprovechando un gran final en el que logró cuatro 'birdies' en cinco hoyos. "He luchado para acostumbrarse a los nuevos hoyos y las cosas han ido mejorando", dijo el líder.

Blanka Vlasic confirma su presencia en el Meeting Ciutat de Barcelona

La campeona del mundo de salto de altura Blanka Vlasic participará en el Meeting Ciutat de Barcelona del próximo 9 de julio y será la cabeza de cartel de un concurso en el que se darán cita cuatro de las cinco mejores especialistas mundiales del momento, incluida la española Ruth Beitia. Vlasic es la segunda mujer en la lista mundial de todos los tiempos con un mejor salto, de 2,08 metros, conseguido el pasado verano en Zagreb. Este año, la croata lleva hasta la fecha una marca de 2,03 y es la segunda del ranking del año tras la estadounidense Chaunté Howard-Lowe (2,05 metros), que también competirá en Montjuïc. Será la primera presencia de la saltadora en Barcelona, y servirá para conocer las condiciones del foso del Estadi Olímpic Lluís Companys, donde al cabo de dos semanas disputará el Campeonato de Europa de Atletismo Barcelona 2010 en busca de su primer título de campeona continental. La prueba tendrá un nivel de final olímpica pues al lado de la croata de 26 años estará la mencionada Howard-Lowe, auténtica sensación de la temporada y que ha batido en dos ocasiones el récord de Estados Unidos (2,04 y 2,05 metros) en las últimas semanas, la italiana Di Martino, que el pasado miércoles en Grosetto saltó 2,01 y es la tercera del mundo este año, y la caribeña de Santa Lucía Lavern Spencer, junto a la española Ruth Beitia, que con 1,98 metros comparten la cuarta plaza del ranking. La mejor marca de cualquier atleta en suelo español la posee la propia Vlasic desde 2007, cuando en la Reunión de Madrid venció con 2,05 metros. Después pidió poner el listón en 2,10 para batir el récord mundial por un centímetro, pero no pudo superarlo. El récord del Estadi Olímpic de Montjuïc está en poder de la cubana Silvia Costa desde hace 20 años: 2,04 metros en la Copa del Mundo de 1989.

Serena Williams logra el pase a la final sin ceder un solo set

No hubo sorpresa alguna y finalmente Serena Williams podrá defender su título en Wimbledon tras superar en dos mangas a Petra Kvitova. La número 1 del mundo, que llega al último partido del torneo sin haber cedido un solo set, tendrá como rival a Vera Zvonareva.

Serena Williams es de esa estirpe de campeonas que con su sola presencia en la pista intimida sobremanera a su rival. Más allá de su calidad o potencia tenística, la estadounidense hace valer su ranking desde antes incluso de saltar a la pista. Por eso, a pesar de verla contra las cuerdas en determinados momentos, nunca se la puede dar por vencida. La menor de las hermanas Williams se impuso a la checa Petra Kvitova por un marcador global de 7-6(5) y 6-2 tras una hora y treinta y dos minutos de juego en un choque disputado en la Pista Central del All England Club.

El único precedente entre Serena y Kvitova había sido en el Open de Australia este mismo año, en un partido que no tuvo color y en el que la checa sólo pudo hacer tres juegos. Evidentemente, la experiencia es un grado y la voluntariosa tenista de Bilovec saltó al verde de la Central con las ideas muy claras: tenía que ser más agresiva que su rival (si es que eso es posible) y estar muy fina con el servicio. Viendo cómo comenzó el partido, con una bola de break desperdiciada por cada una de las jugadoras en los dos primeros juegos del encuentro, sólo se cumplió la primera máxima. Fue Kvitova quien logró la primera ruptura del partido, en el quinto juego, merced a un buen juego desde el fondo con un revés a dos manos que encontraba a la perfección los huecos que una pesada Serena no llegaba a rellenar. La estadounidense se quejaba del viento y la checa de la suerte de su rival, que supo rehacerse a tiempo para igualar la contienda en el siempre clave octavo juego. Dicho lo cual, se llegó al tie-break, muerte súbita que Serena dominó de principio a fin para terminar por apuntarse la primera manga tras 58 minutos.

Serena no ha perdido un solo set en los seis partidos disputados esta temporada en el All England Club y tampoco daba la sensación de poder perderlo en este partido. A pesar del voluntarioso trabajo de la zurda Kvitova, que dejó buenas sensaciones de cara a futuros eventos, Serena sabía que su momento llegaría más temprano que tarde en este segundo acto. Las imprecisiones de Kvitova así lo permitieron. En el quinto juego la estadounidense rompió el servicio y a partir de entonces todo fue un camino de rosas para Serena, que selló con autoridad el pase a su sexta final de Wimbledon.

Nadie puede dudar de que Serena Williams es la actual dominadora del tenis femenino. No obstante, es la número 1 tanto en la disciplina individual como en la de dobles. Sólo cinco mujeres antes que ella han conseguido tal hito (anteriormente lo fueron Martina Navratilova, Arantxa Sánchez-Vicario, Martina Hingis, Lindsay Davenport y Kim Clijsters). La guinda al pastel la quiere poner la estadounidense ganando su cuarto Wimbledon, segundo consecutivo, y su décimotercer Grand Slam. Para ello deberá doblegar en la final del próximo sábado (15:00, hora española) a su última rival, la rusa vera Zvonareva, con la que se ha enfrentado en seis ocasiones hasta al fecha con un bagaje de 5-1 para Serena. Un dato más que la otorga el cartel de favorita.

"Realmente estoy trabajando duro. Es una bendición mantenerse viva todavía en el torneo", dijo la tenista estadounidense tras el partido de semifinales que le ha llevado a la final, donde intentará revalidar el título obtenido el año pasado.

Los focos de Wimbledon se centran en Rafa Nadal y Andy Murray

Rafa Nadal y Andy Murray disputarán una de las semifinales de Wimbledon 2010. En la otra buscarán un hueco en la final Novak Djokovic y Tomas Berdych. De los cuatro semifinalistas, sólo Nadal sabe lo que es jugar una final sobre el verde de la Pista Central del All England Club. El de Manacor lo ha hecho hasta en dos ocasiones, logrando una victoria. Fue en 2008, en su última participación en el tercer Grand Slam de la temporada (el año pasado no pudo defender su título por una tendinitis en sus rodillas) en la que es recordada por todos como una de las mejores finales de la historia de este deporte. Quizá por eso, y porque el balear es el número 1 del mundo aunque la organización le otorgara ser el segundo cabeza de serie, Rafa es el rival a batir.

Para ser campeón hay que ganar aún dos partidos que seguramente sean los más difíciles del torneo. No sólo por la entidad de los rivales, sino por la tensión y presión que uno acumula de ver el éxito al alcance de su raqueta. Si no que se lo digan a Andy Murray. El británico, número 4 del mundo, tiene ante sí la responsabilidad de tomar el relevo que Fred Perry dejó en 1936 cuando Wimbledon asistió a la última victoria de un jugador local en el cuadro individual masculino. Mucho ha llovido desde entonces. Murray, que es el semifinalista con mejor bagaje hasta la fecha en los diez días de competición (sólo ha cedido un set y ha consumido diez horas y doce minutos para llegar a semifinales), tiene que bailar con la más fea. Su rival en semifinales es un viejo conocido para él, un Rafa Nadal que a pesar de estar renqueante de sus rodillas, lleva doce victorias consecutivas sobre el verde londinense.

El 'head-to-head' entre ambos destaca un 7-3 favorable al español, que es quien consiguió la victoria en el único enfrentamiento en césped, allá en los cuartos de final de Wimbledon en 2008 por 6-3, 6-2 y 6-4. Sin embargo, el último precedente del duelo hispano-escocés fue este mismo año en los cuartos de final del Open de Australia, donde Rafa tuvo que retirarse por una nueva lesión en sus rodillas cuando ya cedía por 6-3, 7-6 y 3-0. De cómo soporte la presión el británico y de cómo responda el físico al balear dependerá mucho el sino de este encuentro.

Aunque todos los focos mediáticos estén apuntando a Rafa Nadal y Andy Murray, otros dos hombres lucharán por entrar en la historia. Novak Djokovic buscará su tercera final de Grand Slam (fue finalista del US Open en 2007 y campeón del Open de Australia en 2008) con el acicate de que, pase lo que pase, saldrá de Londres el próximo lunes como número 2 del mundo, hito que alcanzó por primera vez el 1 de febrero de este mismo año, con la salvedad de que ahora adelanta a Roger Federer en la clasificación mundial y no a Rafa Nadal. El de Belgrado nunca ha superado las semifinales de Wimbledon y tiene ante sí una oportunidad única. A pesar de verse afectado por síntomas de fatiga durante esta última semana en la capital inglesa (tuvo que ser atendido al respecto en los octavos de final ante Lleyton Hewitt), 'Nole' parte como favorito para sellar su pasaporte para la gran final del domingo ante el checo Tomas Berdych, virgen en este tipo de situaciones.

Después de cambiar de entrenador hace pocas fechas, el gigante de Valasske Mezirici (mide 196 centímetros, siendo una de las torres del circuito), ha firmado semifinales en Roland Garros y Wimbledon en apenas un mes. Llega a la cita con el aval de haberse 'cargado' a Roger Federer, hexacampeón en estos lares, y con la vitola de 'tapado'. Djokovic y Berdych se han visto las caras en dos ocasiones en el circuito, con sendas victorias para el de Belgrado, que no ha cedido un sólo set ante el checo, que sólo ha sido capaz de ganarle 11 de los 36 juegos en disputa. Del poderoso servicio del checo y de la capacidad de batalla e ingenio del serbio dependerá el acontecer de esta segunda semifinal.