26 de junio de 2010

Cinco olímpicos participan en el Campeonato de España absoluto

Los mejores tiradores españoles, entre ellos cinco olímpicos, participarán este sábado en el Campeonato de España de Esgrima, que se disputará a las tres armas, en ambas categorías, e individual y por equipos, en el pabellón Amaya Valdemoro de la localidad madrileña de Alcobendas.
Así, a la cita no faltarán José Luis Abajo Pirri, medalla de bronce en Pekín, además de Jorge Pina, Javier Menéndez, Jaime Martí y Araceli Navarro, que también estuvieron en los Juegos de 2008.
Además, junto a ellos participará una de las mayores promesas de la esgrima nacional, Pau Roselló, campeón del mundo cadete y bronce en categoría júnior.
La competición individual se disputará en la jornada del sábado, con las finales a partir de las 13.00, mientras que los combates por equipos tendrán lugar desde las 16.00 horas.
Por otra parte, se pondrá en práctica durante las finales, el Nuevo Sistema de Videoarbritaje diseñado y realizado por un grupo de españoles, y dirigido por Fernando Díaz, presidente de la Comisión SEMI de la Real Federación Española de Esgrima.

España quiere continuar con el buen juego ante Eslovaquia

La selección española masculina de voleibol espera conseguir dos nuevas victorias en la cuarta jornada de la Liga Europea y confirmar así el buen juego mostrado ante Eslovaquia, mismo rival con el que se enfrentan este fin de semnana en Madrid.
La Caja Mágica, como ocurriera el año pasado, será el escenario donde los de Julio Velasco afrontarán este doble duelo y que espera ser talismán para volver a ofrecer un buen juego.
España ha ido de menos a más y tras firmar un mal inicio, con tres derrotas y una victoria en las primeras jornadas, confía en que los triunfos en Levice sean el punto de partida para demostrar la calidad de un joven equipo, que quiere presentarse como un candidato al título en la 'Final Four' que se disputará en Guadalajara en julio.
El argentino Julio Velasco volverá a confiar en un bloque muy similar al que se desplazó a tierras eslovacas y que ofreció un mejor juego sobre la pista con los jugadores con más experiencia como Ibán Pérez, Sergio Noda y Juan Carlos Barcala, que se mostraron muy acertados en el ataque.

Larrazábal y Garrido acechan el liderato

El golf español se ha vuelto a postular para el asalto al título en un torneo del Circuito Europeo. La presencia de Pablo Larrazábal e Ignacio Garrido, a uno y dos golpes del líder del BMW International de Munich, el galés Bradley Dredge. El barcelonés repitió la tarjeta del primer día, 66 golpes. Sin la solidez de la primera jornada -sólo cogió una calle en los nueve primeros hoyos-, Pablo vive un momento dulce con el juego corto. "No he jugado bien, pero he metido muy buenos putts al final", decía el joven que sorprendió a todos en el Open de Francia de 2008 y que busca la última oportunidad de entrar en el Open Británico, ayudado en la bolsa por su hermano Alejandro, que jugó como golfista profesional el Masters y el British.
Por la tarde, en otro final primoroso -cinco birdies en los últimos seis hoyos-, Garrido, que sí se ha clasificado por las previas para St. Andrews, se arrimó al liderato. Si no lo logró, fue por los primeros nueve hoyos dubitativos, con tres bogeys y cuatro birdies, que le impidieron dar caza a Dredge, el último de los jugadores que sorprendió a Severiano Ballesteros cuando irrumpió.
El panorama español se anima, además, con la buena colocación de Álvaro Quirós, undécimo, a cuatro golpes y la buena jornada de Alejandro Cañizares, Rafa Cabrera y Gonzalo Fernández-Castaño, que también entran en el fin de semana con opciones de intentar ganar el cuarto título de la temporada para el golf español.
La cruz fue Sergio García. "Esto es lo que hay. No puedo hacer nada", dijo al acabar la segunda jornada que le apartaba del torneo con 76 golpes. Acabó el 150, cruelmente el mismo resultado que alcanzó en Carnoustie en 1999 en aquel Open Británico en el que tocó fondo para luego forjar su carrera. En estos momentos, está perdido. En su palmarés negativo también añadió una marca: jamás había fallado dos cortes seguidos en Europa. Al que sucedió en Madrid en mayo, se sumó ayer éste. Su siguiente parada será St. Andrews, con toda la importancia que ello supone.
Su colapso rescata casos de jugadores como David Duval e Ian Baker Finch, el australiano que modificó su swing después de ganar el Open Británico de 1991 para ganar más distancia, y ya no volvió a ser lo que fue. A Sergio le queda como coartada que tiene 30 años y mucho margen para reconducir una situación que ha tocado fondo.

Montañés y Feliciano López se despiden de Wimbledon

Novak Djokovic cumplió con los pronósticos y acabó con la andadura del español Albert Montañés en la tercera ronda de Wimbledon al imponerse por 6-1, 6-4 y 6-4.
El de Sant Carles de la Rapita sólo aguantó tres juegos ante Djokovic, que firmó el primer break en el cuarto juego (3-1) y rubricó su ventaja en el sexto (5-1) para llevarse el primer set con comodidad.
En el segundo, Nole lo tuvo aún más fácil al abrir con una rotura que no tuvo problemas en conservar, caminando con firmeza hacia el triunfo parcial de la segunda manga (6-4), dada su solidez al servicio.
El tercer set tuvo idéntico guión. El serbio logró romper el servicio de Montañés en el juego inicial y no sufrió para cerrar el encuentro con un nuevo 6-4, ante un Montañés que no disfrutó de ninguna bola de 'break' en todo el encuentro y que puso fin a su aventura en el All England Tennis Club por este año, ante uno de los favoritos al título.
Para Montañés, no hubo dudas de que su oponente "ha estado cómodo durante todo el partido. Veía que hacía lo que quería. Ha hecho muchos winners (un total de 37 frente a los 26 del español) y la verdad es que en todo momento ha ido por delante y eso da mucha tranquilidad".
"Yo he intentado seguir e intentar hacer algún brea'; pero él me ha empezado a romper de entrada, en cada set y eso es complicado, pero intentarlo, lo hemos intentado y no he bajado los brazos en ningún momento y no ha podido ser. Para la próxima", explicó.

España resuelve el pase en su peor partido

España resolvió su partido más difícil y alcanzó la victoria en su actuación menos brillante. Chile se portó como un toro bravo y los jugadores de Vicente Del Bosque tuvieron que templarlo antes de ejecutar la suerte suprema del gol. Tal vez cuando menos lo merecía España, el 1-0 de Villa fue un oasis en medio del desierto. Hasta entonces, Chile dominaba, ahogaba y planteaba dificultades que España ni sabía ni podía solucionar. Sin la posesión del balón, todo se fiaba a alguna acción aislada... al contragolpe. Desde luego, una situación totalmente alejada de la filosofía de la selección.